Actividad 19. Súper A.

¡Querido lector!

¿Cuántas veces te has preguntado cómo sería tu jefe perfecto, tu compañero perfecto, tu casa perfecta, tu mascota perfecta y tu profesor perfecto en otra etapa?

A mí esta pregunta me la hicieron no mucho en el ámbito laboral y no fue fácil porque tendemos rápidamente a idealizar y soñar con características deseables que muchas veces no están contenidas en la misma persona si no que vas picando y cogiendo lo mejor de cada una. Bueno, quizá el sentido de la riqueza de los equipos está ahí, en la heterogeneidad de caracteres, algo que por cierto, me apasiona. 

Hoy en clase, hemos hecho grupos y hemos analizado qué cualidades, competencias y capacidades nos gustaría que tuviese nuestro tutor ideal. Cada uno hemos aportado nuestro granito de arena y nos ha salido un Tutor, llamado Bartolo (Bart para los amigos), muy capaz, competente y completo. ¡Ojalá yo!

Te lo dejo por aquí, para que me digas qué te parece este súper tutor:

Además, tenemos cada uno la oportunidad de plasmarnos a nosotros mismos sobre el papel para explicar cuáles son nuestras cualidades y capacidades. Te voy a dejar a mi Bart Alba para que veas cómo me gustaría ser como tutora (y como profesora) con más o menos ideales, pero intentando mantener mi propia esencia:

Quiero que, aunque vaya despeinada a clase (algo muy común en mi día a día por este pelo que gasto) no me vean como despistada. 

Quiero seguir ganando madurez observacional y ser aún más paciente. 

Quiero ser empática y utilizar las herramientas de las que dispongo para comunicar y compartir. 

Me gustaría ser más creativa y poder utilizar esa creatividad para reforzar la pasión por la docencia y por la Lengua y Literatura castellanas. 

Quiero ser grúa para poder levantar ánimos.

Quiero tener los pies en la tierra siempre, pero también invitar a soñar, plasmando metas realistas. 

Quiero hacerlo de manera firme y segura, desde la justicia que me caracteriza. 

Ya de base soy exigente, guía, soporte, un poco líder y una persona accesible con la que poder hablar y compartir. 

Como ves, no va a ser tarea fácil ser la súper tutora del año, pero son cosas que poco a poco, con la mochila cargada de experiencias, podré ir construyendo mi propio ideal para así dejar la huella que quiero dejar: retadora y ayudadora. 

👩